El hostal de Chivay en el que estoy es bastante cutre y además hace frío, algo normal por la altura a la que estamos, pero tampoco se puede pedir mucho mas por el precio que he pagado, unos 70 soles, unos 16 euros, poco más, por este recorrido. Ya solo lo que se casca le minibús por esos caminos por los que nos mete seguro que cuesta más.
Desayuno a las cinco y media porque a las seis nos recogen para ir hacia el mirador de la Cruz del Condor. Salimos pronto porque, supuestamente, es más fácil verlos volar por la manaña trempano. Aunque reconozco que yo tengo mis dudas. Se supone que vuelan, sobre todo, usando las corrientes de aire ascendentes, al igual que lo hacen los buitres y pajaros parecidos, y a esas horas pocas corrientes ascendentes tiene que haber que de eso, en tiempos, entendía algo. Pero ya se verá
A pesar de ir con hora, porque hemos quedado con los cóndores, hacemos una parada en Yanque donde, casualmente, hay un grupo de bailarines ejecutando la misma danza del amor que nos enseñaron ayer en la cena. A mi ya, la verdad, me preocupa que me enseñen tantas veces la danza esa.
Tambien hay vendedoras, hasta ahora no he visto ningún hombre en los puestos de venta que encuentro en los sitios por los que paso y a lo largo de la carretera. Ofrecen productos típicos de la zona, sobre todo tejidos elaborados con lana de alpaca, recuerdos para nosotros, los turistas, algo de comer, incluso algunas posan con alguna llama o un ave rapaz para que le hagan fotos y cobrar alguna propina por ello.
Pasamo por el punto donde empieza el cañon. Desde aquí se extiende casi 100 km. y en algunos puntos llega a tener un desnivel de mas de 3000 metros. Es más profundo que el Gran Cañon del Colorado.
Segun vamos subiendo, las vistas son más impresionante y también lo es el hecho de pensar que como nos caigamos por esto barrancos de diós nos recogen con espátula porque aunque la carretera, bueno, por llamarla de alguna forma, es un camino ancho pasamos, en ocasiones, cerca del borde para ir esquivando baches o guijarros y eso sumado a un despiste pues haría que ya tuviéramos el lío montado.
La carretera es infernal y se hace bastante pesada la subida. Afortunadamente estamos parando de vez en cuando para contemplar la expectacularidad de este sitio. Y como no puede ser de otra manera, en cada sitio donde paramos hay vendedoras ofreciendo sus productos.
Ya casi hemos llegado y en la última parada que hemos hecho nos ha pasado un ejemplar de condor casi por encima de nuestras cabezas. Es un ejemplar joven, no es muy grande, pero aún así impresiona verle.
Entre las paradas y lo despacio que hemos , hemos empleado casi dos horas y media en llegar y hay unos 40 km. aproximadamente. Aquí vamos a parar unas dos horas para ver si es posible ver algún ejemplar más. La verdad es que aunque no los veamos, las vistas desde aquí son magníficas. Es una zona muy abrupta y en la que también se pueden hacer actividades de senderismo. Hay pueblos a los que solo se puede llegar andando. Será cuestión de verlo para otra ocasión.
Jajaja Tu aprendete bien la danza del amor y luego nos la enseñas que falta nos hace!!!!
ResponderEliminarImpresionantes los paisajes y el colorido de la ropa de las mujeres. Chulisimo!!!!Belen